Brai

Escribir una reseña ajustada a una serie tan larga con tres secciones claramente diferenciadas, aunque relacionadas, es una tarea compleja. Por un lado, porque, aunque los personajes más importantes sigan apareciendo, las tramas giran en torno a protagonistas y secundarios distintos. Por otro, porque las dinámicas de las tres parejas no podrían ser más propias. Intentaré resumir mis sentimientos hacia cada pareja:

Arc-Arm:

Un slowburn tan slow que, a ratos, parecía que nunca fructificaría. La típica relación de un ML que no sabe cómo mostrar sus sentimientos y un MC que parece vivir en las nubes. Cutes, pero quizá un poco faltos de contenido en muchos momentos. La pareja secundaria no me podría dar más igual, supongo que porque uno de sus actores no me agrada mucho.

Yotha-Gun:

Me hicieron sufrir los muy condenados. Después de tantos momentos sin peso del Arc-Arm, la incapacidad emocional de Yotha llegó como un jarrón de agua fría. Y Gun, todas las veces, se quedó ahí. Cómo lloré. Probablemente, mi pareja preferida. El Aou-Boom presente para demostrar que merecían ser principales.

Faifa-Wine:

Fue refrescante que su mayor drama se resolviese en medio episodio. No sé si habría sido capaz de soportarlo de otra forma. Los primeros cuatro episodios de su arco hicieron que adorase a Faifa como personaje, hasta que se junta y empieza a ser insoportable.

En resumen, han sido cuatro meses de mi vida llenos de momentos cómicos, tristeza, tensión, dolor y alegría. Agradezco que existan este tipo de series corales llenas de momentos que me dan ganas de seguir viviendo.