lunaazul

me gustó la historia. La traje a nuestros tiempos, porque aunque se ha avanzado en temas de igualdad, falta mucho por hacer, en unos países más que en otros. La belleza de algunos dramas es que tocan temas en los que al menos en esos 16 capítulos, puedo tener fe en los cambios, la justicia, esperanza en la humanidad.
Se entiende que el final no refleja la realidad de la situación y la época, pero nada quita que puede que en esos años también existieran personas pensantes revolucionarias…